martes, 28 de abril de 2020
Carta abierta a los diputados de la XVI Legislatura del Congreso del Estado de Quintana Roo Por Daniel Osorio García Dirigente Estatal del Movimiento Antorchista de Quintana Roo
Diputada Reyna Durán Ovando
Presidenta de la Junta de Gobierno y
Coordinación Política del Congreso de Quintana Roo.
Diputadas y diputados:
Me dirijo a ustedes de manera atenta y respetuosa en mi calidad de dirigente estatal del Movimiento Antorchista en Quintana Roo, organización que trabaja en el estado desde hace 20 años y cuenta entre sus filas, a más de cuarenta mil quintanarroenses tanto del campo como de la ciudad, distribuidos en los 11 municipios del estado. El Movimiento Antorchista, es una organización de carácter nacional que nació hace 46 años en Tecomatlán, Puebla, tiene presencia en los 32 estados de la república y cuenta con más de 2.5 millones de afiliados.
La razón por la cual me atrevo a escribir a esta Honorable XVI Legislatura es por lo siguiente: Como todo sabemos, vivimos una de las peores crisis generadas después de la segunda guerra mundial. La pandemia del coronavirus o Covid-19, tomó por sorpresa al mundo y hoy existe una debacle sanitaria, económica y social en todo el globo. En México, la crisis comenzó el 27 de febrero, cuando se reportó el primer caso de coronavirus, y desde entonces, nuestro país, hasta el día 27 de abril ha sumado 15 mil 529 casos positivos y mil 434 defunciones, esto, de acuerdo al reporte de la Secretaria de Salud.
Las autoridades, han tomado medidas drásticas para evitar que el virus se propague más aceleradamente y evitar saturación de los hospitales como sucede en España, Italia y Estados Unidos. Estar en cuarentena, mantener la sana distancia, lavarse las manos con agua y con jabón, etc., son medidas correctas. Sin embargo, según el Coneval, (aunque economistas serios sostienen que son más de 95 millones) 55.3 millones de personas en todo el país viven al día, sus ingresos solo le alcanzan para sobrevivir y en otros casos, ni siquiera para eso, por lo que permanecer confinados, en su mayoría, hacinados en casas o cuartos muy pequeños, sin los servicios elementales y con poco o nada que comer, es prácticamente condenarlos a morir de hambre.
Quintana Roo es uno de los estados más perjudicados por el Covid-19 por el número de contagiados y de fallecidos (hasta hoy, somos el sexto lugar nacional con 653 positivos y 85 defunciones) y, porque el 80 por ciento de la economía de la entidad, son los ingresos del turismo, que prácticamente es el más dañado, debido a que los principales visitantes son turistas de Norteamérica y Europa, donde la pandemia golpea con mucha fuerza. En nuestro estado, con poco más de un millón 600 mil habitantes, 563 mil vive en pobreza y 107 mil en pobreza extrema; cerca de 400 mil personas trabajan en el sector informal, es decir, no tiene prestaciones de ley, ni pueden gozar de los beneficios que algunos patrones les dan a sus empleados en esta contingencia. Si tomamos en cuenta las estimaciones del Centro Coordinador Empresarial del Caribe (CCEC), que asegura que para finales de abril habrá cerca de un millón de personas sin empleo en toda la entidad, ítem más, la cosa se agrava porque en la fase 3 de la pandemia, las autoridades han puesto medidas drásticas como el confinamiento obligatorio, el cierre total de negocios “no esenciales”, han prohibido el ambulantaje, los presidentes municipales han cerrado sus “fronteras” y no permiten que la gente salga o entre a sus cabeceras municipales o territorio, esto, hace mucho más desesperante el “quédate en casa” y, por lo que se ve, la emergencia se va a alargar mucho más de lo que las autoridades sanitarias habían previsto. El panorama es terrorífico y se puede salir de control porque la gente ya no tiene dinero y no tiene que comer, y un ser humano con hambre, es capaz de muchas cosas.
En estos momentos, ya hay miles de personas que claman por ayuda, sobre todo, alimentaria. Es cierto que el gobierno estatal ha implantado acciones para quedarse en casa, ayudando con despensas, gas, pago de agua, entre otros, para las familias más vulnerables, algo que apreciamos y aplaudimos, pero es insuficiente, porque a estas alturas, no solamente la gente más humilde tiene hambre, sino que la inmensa mayoría, que como dije, vive de su trabajo diario y, con una despensa al mes, no se alimenta una familia de al menos cuatro miembros.
Por lo que solicito a este honorable congreso del estado, que en sesión extraordinaria, sea virtual o presencial (tomando las precauciones debidas) se formule un punto de acuerdo donde de manera urgente, se proponga al Gobierno Federal que encabeza el Lic. Andrés Manuel López Obrador un Plan Nacional de Distribución de Alimentos que sirva para reforzar el esfuerzo del gobierno del estado y, se asegure la alimentación de los quintanarroenses que no tienen un sustento seguro, que son la inmensa mayoría y así, puedan seguir confinados sin temor a morirse de hambre.
Lo anterior lo expongo, porque es facultad del Congreso velar por el pueblo al que representan y, en casos extraordinarios como el que hoy vivimos, deben actuar en consecuencia para que la gente, durante esta cuarentena, tenga por lo menos, el alimento seguro.
Esto, que estamos solicitando de manera respetuosa, es perfectamente posible, siempre y cuando todos los diputados y diputadas dejen a un lado sus colores y divisiones partidistas, y se pongan a legislar en beneficio del pueblo que hoy sufre. Pongo como ejemplo al Congreso del estado de Michoacán que en sesión extraordinaria el día 24 de abril aprobó, con 30 votos a favor, cero en contra y una abstención, un punto de acuerdo presentado por Omar Carreón Abúd, líder del Movimiento Antorchista en el estado y diputado por la bancada de Partido Revolucionario Institucional (PRI), quien solicitó ante la tribuna se demande al Gobierno de la República que implemente un Plan Nacional de Distribución de Alimentos para los sectores más necesitados, quienes están sufriendo de forma más directa las consecuencias de la pandemia por el Covid-19.
Finalmente, me remito a las palabras pronunciadas por la diputada Reyna Durán Ovando antes que fueran cerradas las puertas del congreso: “En el Congreso del Estado tomamos acuerdos en consenso con todas las fuerzas políticas, privilegiando la salud pública y el bienestar de los quintanarroenses para que, en unidad, logremos superar la emergencia sanitaria que atraviesa nuestra entidad y nuestro país. Lo primero, lo más importante, es la salud. Como legisladores hoy, sin distingo de colores partidistas y de ideologías, estamos enfocados en que nuestra toma de decisiones coadyuve en el combate a esta enfermedad que está causando estragos a nivel mundial”. Pues bien, diputadas y diputados, este es el momento de demostrarlo, haciendo frente al problema con acciones concretas. Vale.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
El ex secretario de Turismo, Enrique de la Madrid Cordero, fue reconocido por la Asociación Mexicana de la Industria de la Construcción (AMIC).
El trabajo realizado en beneficio de Quintana Roo durante la pasada administración federal, es la razón. La AMIC respalda los objetivos y pr...
-
Mujeres productoras de pitahaya de Chumpón serán apoyadas por el gobierno del estado: Inmaya Sera por medio de recursos del Gobierno del Est...
-
Chetumal.- La candidata a diputada en el Distrito XV por el partido Confianza por Quintana Roo, Abril Sabido Alcérreca, se pronunció por...
No hay comentarios:
Publicar un comentario