El hostigamiento laboral y desvío de recursos, con marcados fines electorales, son constantes en el Ayuntamiento de Othón P. Blanco.

El empecinamiento del secretario particular de la Presidencia Municipal de Othón P. Blanco, Luis Gamero Barranco, es el orquestador.

Inclusive, por los nexos que tiene a nivel federal, el presidente municipal de Othón P. Blanco, Othoniel Segovia Martínez, está supeditado a lo que determine su secretario particular.

En su afán por tener popularidad, Gamero Barranco realiza, lo que subalternos catalogan, actos anticipados de precampaña.

Pretende que toda la estructura de Ayuntamiento de Othón P. Blanco, opere para tal fin.

Aquellos que no acepten o se contrapongan a sus objetivos, son objetos de hostigamiento laboral.

Inclusive, se han dado casos de despidos mediante artificios políticos.

Casos así ocurrieron en las direcciones de Servicios Públicos Municipales, Obras Públicas y Ecología, así como Oficialía Mayor.

Y es que situación similar ocurrió anoche en la Dirección de Comunicación Social, pues Rodrigo Madera presentó por cuarta ocasión su renuncia.

Eso deriva por los enfrentamientos internos entre grupos al interior.

Aunque el más fortalecido es el que respalda a Gamero Barranco, los demás no permiten su avasallamiento.

En consecuencia, ya se analiza solicitar la inspección de la Auditoria Superior del Estado de Quintana Roo (Aseqroo), para la fiscalización de recursos; y el Instituto Nacional Electoral (INE), por supuestos actos de precampaña.